Fin de la historia
Así es. Como lo oyes.
Me dijo que no.
Más bien, fue un “lo
siento, ahora soy yo la que no está preparada”. Insistiendo en que de modo
alguno se trataba de una despechada decisión. Ciertamente no sabía lo que
quería.
La chica de las
cosas siempre claras no mintió. Nunca lo hace. Nunca lo hará.
Siendo sincero, no me
lo esperaba. No me lo podía creer. Aquello sí fue una lección en toda regla y,
obviamente, más que merecida.
Exacto, finalmente
logré apartar mis miedos, mis obsesiones, mis prejuicios. Con coraje decidí
volver a intentarlo. Pero el destino me frenaría los pies en seco. Y joder si
me los frenó… tanto que la inercia me mandó hacia sus dulces labios. Pero
claro, me volví a topar con la seria realidad. Dos veces en menos de un minuto. ¡Vaya tarde!
No obstante, esa
noche no me iría de vacío. Qué va, ni mucho menos. Volví a verla sonreír. ¿Qué
más podía pedir?
Aunque me rechazase cuanto
consideró oportuno, mereció la pena.
Anduve uno de los
pasos más valientes de mi corta vida. Por primera vez enterré todas las dudas en
el cementerio de mi soledad. De nuevo, le esbocé aquella inspiradora sonrisa en
el radiante rostro que la custodia.
Y ¡qué sonrisa! De
las que de verdad enamoran. Y de eso algo entiendo, créeme.
Lo que ella no sabía
es que aquella enamoradiza sonrisa escoltaba un enamorado corazón. Lo que ella
no sabía es que en frente tenía a un hombre dispuesto a lo imposible por
recuperar su amor. Lo que ella no sabía es que aquel ‘no’ escondía un rotundo ‘sí’.
Volveré con nuevas
noticias…
O tal vez no. Eso ya
sería otra trilogía.
(Parte 3)
El portaminas negro
Que difícil es hacer coincidir nuestros momentos, nuestras edades y nuestros lugares. Y por supuesto nuestros "quereres" (como a mi me gusta llamarlos). Y que duro es cuando aún hay dos "quereres" que quieren y no pueden. Palabra de sufrimiento.
ResponderEliminarEsperando la siguiente trilogía. De corazón.
Leri
http://sobreviviralos20tantos.blogspot.com/
Espero que la próxima vez lleguen a coincidir. Por el bien de ambos. Pero cada vez parece más difícil llegar a compaginarse. Y más aún cuando hay tantos y tan sinceros "quereres".
ResponderEliminarMuchas gracias por seguir ahí leyendo mis inquietudes. Espero que nunca dejen de gustarte.
Un abrazo.
simples personas encontradas en complejas "descasualidades"...
ResponderEliminary aún así incluso la tristeza se hace maravillosa!
os invito a pasar por mi blog:
entrelavidaylasuerte.blogspot.com